jueves, 17 de abril de 2008

Una historia de un lobo

Introdución
Hola niños y niñas, con caperuzas o si ellas, a mi me da igual porque nunca me he comido ninguna. Os voy a contar algo y digo "algo" porque no se si será una historia, una paranoia o lo que vaya saliendoia (...por seguir la rima, me perdonen los puristas). No se, me gustaria titular el relato: "como puede un lobo, rata, hormiga, gato especimen cualquiera... ser feliz". Coño menuda pregunta existencial!, ya ya lo sé a mi tampoco me gusta siquiera pensarlo pero joder a todos nos pasa no? ....perdone señora ameba no queria ofenderla.

Continuando la introducción advertimos a los lectores que el autor con este texto no pretende motivar, informar, abrir un debate en naciones unidas ni salvar al jodido mundo. Simplimente escribir para deshaogarse o mas bien por que si.

21:21 hrs Bob Dylan sonando

No se como empezar la verdad, no quiero sonar trancendental, ni emotivo ni suicida, pero es que esto ahora mismo es un intento de atrapar el aire, sin saber ni siquiera si lo quieres.
Intentarlo es lo unico que puedo hacer mientras degusto el primer flote, va por ustedes y por la loba!
Se de la existencia del dicho: la felicidad es saborear el momento. Pero cúal es ese momento? o se refiere a todos?, el momento entonces:
es igual a sensación. Supongo o quiero entender que se refiere a los buenos momentos. Pero que es lo que hace falta para que un momento sea bueno?. No estar jodido, no tener enfermedad, no estar a regimen, no poder tomar flotes por prescripción medica o tener que preparar oposiciones.
es igual a libertad: para hacer lo que te apetece sin más, precisamente sin más cosas de tu alrededor que te hagan pensar, que te preocupen o que te midan el tiempo que tienes para hacer algo o puedas hacerlo. Dejar que las cosas ocurran casi, como expresarlo, por si solas y no porque las permita salir el cuco de un reloj, el tiempo que no sea tu enemigo ,sino tu aliado.Poder correr con él incluso adelantarle
es igual a esa sensación que te sube por dentras de los oidos y te aprieta el cuello como lo hace delicadamente una gata llevando a su pequeño gato. Bueno, en mi caso es la mama loba a su lobezno a su lupito.
En fin ultimamente hecho de menos esa senSación cada dos por tres. Aunque no dejo de moverme, hacer y sentir esas cositas que me hacen feliz. Como por ejemplo ahora mismo.
Un muerdo del lobo